Amor implica libertad de escoger. Krishna que las almas lo amen- existimos para ese propocito- pero El no obliga a nadie a amarlo. Cuando el alma por su propio libre albedrio escoge amarlo a El, El permite ser controlado por ese amor.
Nuestra libertad de escoger tiene consecuencias. Se dicidimos escoger ir en contra de nuestra naturaleza, rechazando amar a Krishna, nuestro innato deseo de amar es dirigido hacia cosas temporales y búsquedas en este mundo. Emprendemos una búsqueda para llenar el vacío creado por la pérdida de nuestra relación de amor por Krishna. Pero las cosas temporales de este mundo nunca pueden satisfacer nuestros deseos espirituales eternos.
En la vida humana debemos entender el sufrimiento inevitable que traemos sobre nosotros por nuestro amor mal dirigido, vida tras vida. Ahora podemos decidir libremente remediar la situación. Podemos tomar las poderosas prácticas espirituales del Bhakti yoga, que puede despertar nuestro amor original por Krishna, darnos completa satisfacción, y entregarnos de vuelta en Su siempre atractiva compañía.